
La nueva serie sobre la hija del matrimonio Addams, interpretada por Jenna Ortega, no solo atrae a los amantes de esta historia, sino que los fashion lovers tienen un nuevo ícono. Lúgubre, oscuro y enigmático, así es el look de Merlina.
Cabello negro, trenzas, una mirada sombría pero ingeniosa, un homor sarcástico y sagáz, y un look de preadolecente pero, en vez de rosa, full-negro. Un estilo muy alejado a la estética Barbie y ultra femenina para las chicas de su edad. Así es la Merlina, (o Wednesday, en su versión de habla inglesa) de Jenna Ortega, la hija mayor de los Addams, una familia icónica que nació como una tira de humor gráfico, que supo llegar a la pantalla chica en los 60 ́s, para dar el salto al cine en 1991 con la llegada de de The Addams Family (1991), dirigida por Barry Sommerfeld. La película taquillera definitiva que marcó esta saga dentro de la cultura pop como una referencia indiscutida de los años 90s.
Los Locos Addams nunca se fueron y siempre estuvieron dando vueltas en distintos formatos y expresiones, ya sea en musicales o series animadas. Sin embargo, en 2022 hicieron un nuevo comeback con el estreno de Netflix de Wednesday, la serie protagonizada por la actriz latina Jenna Ortega. Esta vez, ella es el centro, ampliando el abanico de su personalidad, pero también de su look.
Por eso, no sorprende a nadie que la estética gótica haya vuelto a llenar TikTok, Instagram y Pinterest.
Los rasgos góticos que veremos este 2023
Sin embargo, naturalmente esta tendencia no la inventó Merlina, sino que se inspira en referencias vinculadas no solo al periodo gótico, sino también a la inglaterra victoriana, donde la literatura y la cultura popular tomó ribetes de fascinación por lo tenebroso, las brujas, los vampiros, los hombres lobo, la luna llena, las sombras y otros seres terroríficos, como Frankenstein.
Estos personajes monstruosos, sin dudas, no tardaron en aparecer, años más tarde, en una nueva expresión artística en ascenso: el cine, que llevó a la gran pantalla y popularizó hasta el infinito esta estética oscura y lúgubre. En los 70’s y 80’s tuvo su revival de la mano del punk y de bandas como The Cure, que tomaron esas referencias para proponer una impronta rupturista y contracultural, que también se manifestó en varios look de Madonna. A principios de los 2000, a su vez, se reinventó de la mano de las tribus urbanas de adolescentes que usaban los cementerios como escenario de sus sesiones de fotos, donde predominaba el cuero negro, los ojos súper delineados, las tachas, los borcegos y el pelo que casi cubría todo el rostro.
Y ahora, Merlina volvió a imponer, una vez más, esta moda que rompe las reglas, rechaza la paleta de colores tradicionalmente femenina y apuesta por la transgresión y un look de impacto…¡darks!