Quizás no lo hayas escuchado nombrar, pero seguramente lo has visto en algún lugar. El greige es el nuevo color de vanguardia en el interiorismo. En casas o en departamentos, en livings y habitaciones, en mantas, alfombras, en sillas o en sillones, el greige es tendencia en lo que a diseño de interiores se refiere.
¿De dónde proviene este color?
El término “greige” combina entre las palabras “gray” (gris en inglés) y “beige” (llamado en algunos países hispanohablantes como beis o beich). Esta nueva palabra designa un tono neutro que se encuentra en el espectro intermedio entre esos colores. En sus distintas tonalidades, puede tener una tendencia más grisácea o más cercana al beige, dependiendo de la proporción que contenga de los colores que lo conforman.
¿Por qué elegirlo?
El greige tiene la elegancia, la sofisticación y la facilidad combinatoria del gris y, por otro lado, tiene la calidez y la suavidad del beige, que puede transformar cualquier ambiente en un espacio tan distinguido como acogedor.
Hace tiempo la moda en diseño de interiores abandonó los colores estridentes. Apuntó a una nueva paleta que concluyó en esta preferencia: desde el gris elefante, que fue tendencia hace algunos años, hasta los clásicos tonos “crema” o marfil, elegidos frente al blanco por su facilidad para disimular roces y pequeñas manchas. Con el carácter del primero y la versatilidad de los segundos, el greige es un color ideal para cualquier ambiente.
Los motivos que impulsan esta nueva moda de interiores
Entre las razones que vuelven al greige el color predilecto de los últimos tiempos, podemos mencionar: su carácter atemporal, su facilidad combinatoria, su elegancia, calidez y suavidad, y además su potencia para ampliar los espacios.
Si bien se luce en la actualidad, difícilmente pueda quedar rápidamente demodé. Frente a los permanentes cambios de moda en estilos de muebles o accesorios, este color funciona como una opción interesante pero neutral que, resaltando el carácter del espacio, se muestra fácil de combinar. Además de su adaptabilidad a los distintos estilos de diseño interior, desde el mobiliario clásico de época o el estilo rústico campestre hasta las últimas tendencias como el escandinavo o la vuelta del mid century style, el greige puede utilizarse en todos los ambientes para añadir interés visual.
En segundo lugar, es un color sofisticado que transmite calma y suavidad. A diferencia de los tonos fríos, que quitan calidez al hogar, y los tonos cálidos, que no aportan una elegancia particular. El greige crea una atmósfera distinguida, pero acogedora.
Por último, frente a la tendencia dominante en las ciudades de vivir en espacios cada vez más pequeños, este color aporta una nota de carácter que, a diferencia de colores más agudos, no achica el espacio, brinda una máxima sensación de confort y de ampliación de ambientes. Por eso, si buscás dar personalidad a tu pequeño departamento, oficina o monoambiente, esta útil opción es particularmente chic.